RECONOCIMIENTO
Una gran noche para Joan Manuel Serrat
Las Vegas. Joan Manuel Serrat, La Persona del Año en la entrega número XV de los Latin Grammy, es un símbolo de la música latina, un referente para muchos de los cantantes que vinieron después que él.
Varios de ellos (Pablo Alborán, Pau Donés, Diego Torres, entre otros) interpretaron sus canciones el pasado miércoles en la cena que cada año hace la Academia de la Música en este homenaje. “He tenido la oportunidad de escucharles en una demostración de afecto, de generosidad que fue maravilloso”, comentó Serrat.
En conversación con los medios de comunicación en la sala de prensa de la premiación, y previo a haber recibido su galardón, el cantautor catalán expresó que nunca ha trabajado con miras a los reconocimientos.
Esto a propósito de las declaraciones que diera su colega, Joaquín Sabina, al periódico El País, en las que decía que le daban este premio 40 años tarde. “Cuando empezaron a repartirse estos premios no me sentaba delante de la radio, del televisor esperando a ver si se acordaban de mi. Recibirlo es muy fantástico”, dijo.
Pese a que definitivamente Serrat (Barcelona, 1943) es uno de los representantes más importantes de la canción de autor en castellano y catalán, y que le tocó vivir en una época en la que sus canciones eran himnos de los tiempos de represión que vivió su país y los de América Latina, no se considera tal.
“No creo que haya cumplido ninguna mision. He hecho algo fantástico y es hacer lo que me daba la gana. Mi vida no ha sido una entrega devota a los demás, ha sido escribir, que es lo que me gustaba”, comentó el autor de “Penélope” y “Esos locos bajitos”.
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LAS PALABRAS
DE JOAN MANUEL: “Su trabajo artístco y su figura siempre han estado en contra de los totalitarismos (estuvo exiliado en México en tiempos de la dictadura franquista) y ha sido partidario de los cambios para el bien social, es pesimista cuando habla del futuro. “Si no somos capaces de cambiar las reglas por las que se mueve el presente, dificílmente podemos esperar un futuro mejor”, dijo en respuesta a una de las preguntas de los periodistas.
Siguiendo en ese mismo orden, Serrat no cree que sus canciones sean capaces de generar cambios sociales. “La música no protesta, protesta la gente”, manifestó, y que las canciones son un buen instrumento para acompañar a la gente en las luchas.
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